Un distractor es cualquier estímulo que este sucediendo fuera de nuestro enfoque de trabajo. Por ejemplo, el televisor cuando se intenta estudiar; un ruido cuando se necesita concentrar en algo más, etc.
La capacidad de ignorarlos y enfocarse satisfactoriamente en algo más se da gracias a la atención, un fenómeno psicológico que tenemos todos los seres humanos, unos más desarrollados que otros. Esto porque es necesario ejercitarlo y trabajarlo con diferentes actividades del diario vivir como la educación o el deporte para ser cada día mejor.
La atención surge desde la niñez y es un aspecto clave para todas las actividades que realizamos en nuestro día, desde hablar con un amigo, leer un libro, hacer ejercicio, estudiar, estar en clase, trabajar y más. Esto para saber que estamos haciendo, como lo estamos haciendo y que vamos a hacer con respecto a la situación, saber responder, llevar a cabo una acción o aprender.
En el deporte o entrenamiento normalmente tenemos muchos distractores como la música, otros compañeros realizando también ejercicio, si estamos en la calle lo que ocurre a nuestro alrededor, en un partido la gente disfrutando con mucho ruido, personas hablando y es necesario aprender a ignorar aquellos que no son importantes de todos ellos y prestar atención solamente a los necesarios para la actividad que estamos realizando. Por ejemplo, el entrenador, la rutina, el ritmo, nuestro cuerpo, el ejercicio, la postura, si hay dolores anormales, nuestros compañeros, los contrincantes y más.
Cuando estamos pendientes de muchas cosas al tiempo no somos conscientes de lo que pasa en nuestro cuerpo, no sabemos si estamos haciendo bien el ejercicio (para ver y tener resultados), si tenemos bien la técnica como la postura para evitar lesionarnos o producir dolores o malestares en el cuerpo, escuchar al entrenador para saber cuando estamos haciendo algo mal, cuando hay cambios en el ritmo o en el cuerpo, para cambiar de ejercicio y más. Psicológicamente el estar atento a nuestro cuerpo nos permite crear un vínculo importante entre nuestra consciencia y el mismo, crear autoestima, autopercepción, confianza, seguridad, fuerza y más.
Entonces cuando estamos aprendiendo a no distraernos no solo estamos trabajando y ejercitando nuestra mente, también estamos aprovechando más los beneficios del ejercicio y el deporte, aprendemos a ser conscientes de nuestro cuerpo y de nosotros mismos, cuidarnos de lesiones o dolores que se puedan producir por una mala postura o una mala técnica. Evitar también complicaciones por estar pendientes del entrenador y las instrucciones que está dando. Sacarle más provecho al entrenamiento para ver y disfrutar de los beneficios que este tiene.
Deja una respuesta